Un plato de cuchara para el verano, ligero, lleno de sabor, proteínas y fibra para consumir templado o caliente.
Las acelgas de colores son difíciles de encontrar pero son una delicia, si no hay se puede preparar perfectamente con acelgas normales, igualmente nutritivas y llenas de propiedades saludables.
Esta vez he añadido una cucharada de sofrito ‘El Mosqui’, un producto que fabrican en el restaurante del mismo nombre en Cabo de Palos en Murcia. Es un sofrito especial para preparar el arroz ‘caldero’ pero se puede utilizar prácticamente para todo. A base de ñoras (pimientos choriceros), tomate y aceite de oliva es una ayuda estupenda, sin aditivos de ningún tipo, es una pena que sea tan difícil de encontrar.
En ausencia de esta pequeña maravilla se puede hacer un sofrito de tomate y ajo muy concentrado y añadir pimentón al final, también es riquísimo…. Todo vale si las alubias son de calidad, las acelgas de confianza y lo vamos a compartir con gente del corazón…
Ingredientes:
250 grs de alubias blancas de riñón de La Bañeza
1 manojo de acelgas de colores
1 lata de bonito al natural
1 cucharada de sofrito ‘El Mosqui’
Aceite de oliva
1 guindilla
Agua, sal y pimienta
Preparación:
La noche antes poner las alubias en remojo con agua fría y dejar entre 8 y 12 horas.
En una cazuela de hierro fundido poner las alubias cubiertas de agua fría, la cucharada se sofrito El Mosqui, la guindilla deshecha y el bonito al natural, llevar lentamente a ebullición, cuando rompa a hervir tapar y mantener media hora a fuego lento. Deben estar justo cubiertas de agua, sumergidas pero no nadando. Al final debe quedar con poco caldo
Mientras tanto lavar las acelgas, escurrirlas y trocearlas. Pasada la media hora añadir las acelgas y un buen chorro de aceite de oliva. Volver a tapar y dejar cocer a fuego lento 1 hora más o hasta que las alubias estén tiernas pero enteras.
Es un plato que mejora con unas horas de reposo, se puede tomar templado e incluso frío… A gusto de cada uno.