Ni la había probado antes ni había oído hablar de ella, a la vuelta investigando encontré varias versiones, todas combinan legumbres, verduras y productos animales. Son pucheros tradicionales donde todo cabe y todo combina de maravilla.
Nos encantó una vez más, un sabor irrepetible.
A mí los que me encantan una y cada vez más son Walk Off The Earth 🙂
Ingredientes 6 personas:
200 gr de judías blancas
200 gr de garbanzos
300 gr de acelgas
300 gr de apio
100 gr de morcilla de cebolla
150 gr de chorizo
150 gr de panceta ibérica
1 hueso de jamón serrano
1 hueso blanco de ternera
1 hueso de espinazo de cerdo salado
1 cc de comino
1 cc de pimentón de la Vera
1 chorro de aceite de oliva virgen extra
Sal
Preparación:
Las legumbres deben estar previamente remojadas entre 8 y 12 horas, por separado, las alubias en agua fría y los garbanzos en agua caliente.
Lo vamos a hacer en olla exprés en 40 minutos pero por supuesto en una olla de hierro fundido o de barro será un escándalo de buena y una tortura el delicioso olor durante 3 horas cociendo a fuego lento.
Lavamos y troceamos las acelgas y el apio.
En la olla con agua fría ponemos las alubias con los huesos y los embutidos. Lo llevamos a ebullición, si vemos que hay espuma la retiramos con una cuchara antes de añadir los garbanzos, las verduras, el comino, el pimentón y el aceite.
Debe estar cubierto de agua completamente.
Tapamos la olla y dejamos cocer 40 minutos desde que alcanza la presión de funcionamiento. El tiempo varía con cada olla, será el correspondiente a garbanzos.
En olla tradicional lo dejamos cocer tapado a fuego lento durante 3 horas o hasta que los garbanzos estén listos. Debe estar siempre cubierto de agua.
Personalmente me gustan las legumbres caldosas, va en gustos naturalmente.
Pasado el tiempo despresurizamos y abrimos la olla, probamos de sal, corregimos y dejamos reposar.
Antes de servir sacamos los huesos, separamos la carne y el jamón, troceamos el chorizo y la panceta, normalmente la morcilla se habrá deshecho. Devolvemos todo a la olla y mezclamos.
Servimos en platos hondos, acompañada de buen pan rústico es una comida de muchísimo respeto, una pasada.
Gana muchísimo con un reposo de tres o cuatro horas, y con el paso de los días.
Para nosotros ha sido un descubrimiento, ya nos contaréis.