Estamos en temporada de crepes, después del día nacional de la crepe que fue el 2 de febrero (va en serio) hemos publicado el tutorial de ¿cómo hacer crepes? y la versión dulce más deliciosa y más fácil de hacer, las crepes a la cassonade (en su defecto cualquier azúcar que te guste).
Por eso tiene sentido que ahora te contemos la versión más sencilla y resultona de las crepes saladas, las crepes con jamón y queso. Además ya casi sabes hacerlas.
Fíjate qué pintaza tiene ese mordisco, y son más ligeros que el típico sandwich mixto porque tienen menos harina y menos grasa proporcionalmente. Esto es una delicia y con una ensaladita verde te marcas una cena de marqués.
Y si ya te pones música de pensar en cosas fantásticas, flipas.
Ingredientes:
- Crepes hechos en casita de 25 cm de diámetro
- Jamón York u otro fiambre que te guste (1 loncha por crepe)
- Tu queso en lonchas favorito, en este caso emmental (1 loncha por crepe)
Para otras medidas adapta la cantidad de relleno
Preparación:
Puedes usar crepes preparados con antelación y guardados en la nevera o hacerlos sobre la marcha, en ambos casos sigue las instrucciones de nuestro tutorial.
En ambos casos calienta tu sartén o crepera y o bien calientas una crepe unos segundos por un lado y das la vuelta o bien la cuajas por un lado y das la vuelta.
Partes una loncha de queso en 2 partes triangulares y las sitúas sobre una mitad de la crepe, encima pones la loncha de jamón también a medida, doblas la crepe sobre sí misma y luego otra vez como ves en las fotos. Falta la del jamón pero ya te la imaginas que eres mayorcito.
Y listo, preparas a razón de dos por comensal (o más o menos, sé creativo y flexible) y las sirves inmediatamente.
Mira qué pintaza con sus bordes de puntilla…
A mano como en la foto de arriba o con cuchillo y tenedor, disfrútalas como se te antoje, pero date un capricho.