Es difícil describir o imaginar la combinación de la lechuga y el queso con el toque justo de pimienta, quiero decir que la pasta de esta forma hay que probarla al menos una vez y pasará a la lista de recetas con estilo para una crisis
Alquimia para principiantes, deliciosa, simple, coste irrisorio, agradable a la vista, esta receta lo tiene todo para gustar aunque quizá ni el nombre ni las fotos sean lo bastante atractivos. La receta original de La cuchara de plata era penne con lechuga, los gigli son una licencia de color firmada por Hacendado.
Ingredientes 4 personas:
400 grs de gigli u otra pasta corta
1 lechuga hermosa en juliana
100 grs de gruyere rallado
Sal y pimienta recién molida
AOVE
25 grs de mantequilla
Preparación:
Cocemos la pasta al dente en una olla destapada con agua hirviendo (1l de agua y 1 cucharadita de sal por cada 100 grs de pasta).
Mientras aliñamos la lechuga con sal y pimienta (generosidad con la pimienta) y un chorrito de AOVE, la extendemos en el fondo de una fuente refractaria, cubrimos con la pasta, luego el queso y unos toques de mantequilla.
Glups… la receta realmente es primero la pasta, luego la lechuga, luego el queso y la mantequilla. Whatever… que está buenísima, si alguien se anima ya sabe que hay dos opciones incluso en una receta tan sencilla, innovación por encima de todo.
Al horno 20 min a 180º, servir inmediatamente, ideal con vino tinto ligero
Realmente bueno, elegante incluso