¡Son tan monas, tan ligeras, tan suaves, tan sugerentes!
¡Que cuando las vi no me pude resistir!
Que no tontos, ¡que hablo de las tartitas!
Ingredientes para 6 unidades: (gr=gramo, Vel=velocidad, ºC=grado Centígrado, sg=segundos, min=minutos)
120 gr de almendras crudas peladas
120 gr de azúcar blanca
2 huevos (120 gr)
La corteza rallada de un limón
Una pizca de canela
Azúcar glas para espolvorear
Preparación:
Como se deduce fácilmente la proporción es el mismo peso de huevos, almendras y azúcar. El resto va de batir o montar las claras o no, para que queden esponjosas o densas.
Lo primero es moler las almendras hasta dejar reducidas a harina. Esto podemos conseguirlo con la Thermomix 10 sg a Vel 10, o con otra batidora de vaso, o, al límite, machacando amorosamente en un mortero.
A continuación se trata de batir los huevos con el azúcar hasta conseguir una mezcla espumosa. Esto lo haremos con Thermomix usando la mariposa en las cuchillas durante 6 min, 37ºC a Vel 4 y luego 6 min más sin temperatura. O de forma tradicional con unas varillas eléctricas o manuales batiendo durante el mismo tiempo.
Una vez que tenemos una mezcla esponjosa de huevos con azúcar añadimos la ralladura de limón y la canela, mezclamos e incorporamos las almendras trituradas.
Si estamos en la opción Thermomix mezclamos 5 sg a Vel 3. Si no, mezclamos sin más.
Esta mezcla la distribuimos en moldes individuales llenando hasta 2/3 partes de su capacidad, yo lo hice en moldes de silicona para magdalenas sin usar cápsula de papel y al desmoldar se quebraron algunas porque son extremadamente frágiles. La próxima vez pondré papeles.
Una vez distribuida la masa en moldes los llevamos al horno precalentado a 180ºC y horneamos durante 20 min.
Sacamos del horno y llevamos a una rejilla sin retirar del molde. Una vez completamente frías desmoldamos con mucho cuidado.
Presentamos en una fuente bonita y espolvoreamos azúcar glas.
Como puede verse tuve un porcentaje de roturas apreciable pero buenas estaban igual. No recibí ninguna queja debo decir.
Las tomamos con vino dulce. ¡Qué rico todo!
Es una versión de la archifamosa tarta de Santiago pero en porciones individuales.
Fuente: Un pedazo de pan, un blog magistral en el que siempre se aprende y se admira.