Esta es una lasaña imprescindible, el sabor de las espinacas matizado por la nuez moscada con la pasta crujiente es una experiencia para invitados y anfitriones.
La primera vez que la hice no estaba nada convencida y me sorprendió tanto que se ha convertido en habitual para compartir, es divertido escuchar los comentarios…
Dos condiciones para el éxito:
- La calidad de las espinacas, tienen que ser frecas y muy tiernas, el ideal, espinacas baby.
- La elección de la lasaña, entre las industriales precocinadas destaca sin duda la marca Barilla
Por otra parte es tan fácil que apetece repetir, merece la pena darle una oportunidad….