Ahora que todo el mundo piensa en las cenas y comidas de Navidad yo sólo pienso en los desayunos de Navidad. El año pasado por primera vez celebré mi cumpleaños con un desayuno y no creo que vuelva a celebrarlo de otra forma, es original, es entrañable, es caprichoso y es delicioso.
Más tarde ya en verano asistí al mejor desayuno de cumpleaños que haya jamás acontecido, el de mi sobri, que prepararon sus hermanos, todos menores de edad así que vergüenza a los adultos que no se atrevan. La foto lo dice todo, ya sé que es difícil de superar pero hay que tener objetivos retadores o nos quedaremos en lo mediocre.
Por eso te proponemos diferenciarte esta Navidad con desayunos perfectos que tus invitados no van a olvidar fácilmente. Puede ser que te encuentres en una situación tipo «vuelveeeeeeeee a casa vueeeeelve por Navidad» es decir reencuentro familiar o de amigos durmiendo en la misma casa o que te encuentres conviviendo con la misma gente que el resto del año, o que vivas solo y te des un homenaje con música y lectura matutina o directamente y lo más estiloso-glamuroso-vanguardista: que organices un desayuno de Navidad con quien tú quieras.