Vieiras gratinadas

Aquí las tenemos recién salidas del horno, a punto de aterrizar en platos individuales, para hacer felices a unos cuantos heliogábalos.

Si no las has probado nunca es tu momento y si las conoces date el gustazo, un entrante fácil, exquisito y original. Fuera de Galicia no es habitual comer vieiras gratinadas y es una pena porque son deliciosas.

Una copita de vino blanco gallego muy frío marchando por favor.

Ingredientes 8 personas:

• 8 vieiras grandes con su concha (congeladas en este caso)
• 400 gr de cebollas
• 50 gr de aceite de oliva virgen extra
• 200 ml de vino blanco Ribeiro o Albariño de calidad
• 75 gr de jamón serrano picado
• 1 guindilla
• Pan rallado casero

Preparación:

Si las vieiras son congeladas suelen venir limpias con su concha cóncava. si son frescas hay que abrirlas tirando la concha plana, quitar la membrana que las recubre y el tubo digestivo que es de color oscuro y dejar sólo el cuerpo blanco de la vieira y el coral que es de color rojizo. Se lavan con agua fría cuidadosamente.

Disponemos cada vieira en su concha y reservamos. Pelamos la cebolla y la picamos menuda, en una sartén ponemos el aceite a calentar y cuando echa humo añadimos la cebolla picada y la guindilla deshecha.

Sofreimos tapado a fuego medio-bajo durante 30 minutos aproximadamente, movemos de vez en cuando vigilando que no se pegue o se tueste demasiado. La idea es obtener una cebolla suave con un tono café con leche claro. Cuando está lista añadimos el vino y subimos el fuego, cocemos destapado hasta que se evapora el líquido.

Añadimos el jamón picado y mezclamos. Este sofrito se puede hacer con antelación, el día antes o incluso tenerlo congelado y dispuesto para su uso.

Repartimos el sofrito sobre las vieiras de forma que la carne de la vieira quede cubierta, cubrimos con pan rallado, regamos con un hilo de aceite de oliva virgen extra y gratinamos a 220ºC durante 20 minutos o hasta que están tostaditas. La cobertura debe quedar crujiente y el interior suave.

Se sirven inmediatamente con una copa de vino blanco, normalmente el mismo  que usamos para cocinarlas.

¡Deliciosas!